La composición es, básicamente, la distribución de elementos en una fotografía o pieza gráfica. Con una composición u otra lo que busca un fotógrafo o diseñador puede ser: hacer que un elemento destaque por encima de otros, transmitir armonía y orden con distribuciones simétricas, mostrar desorden con distribuciones caóticas, y un sinfín de recursos...
Ahí reside la magia de la composición. Dos fotos de una misma escena, con los mismos elementos y parámetros de la toma, pero en las que varíe la distribución de los elementos, pueden transmitir mensajes completamente opuestos. Ésa es, precisamente, la grandeza y la “dificultad” que encierra la composición. Por eso debemos pasar a dominarla, a determinar ciertas "reglas de composición" que llevarán a una buena lectura del mensaje que se desee transmitir.
No existe una regla maestra o un conjunto de reglas que te aseguren siempre el éxito en tus composiciones.Sí hay directrices o pautas que nos permitirán “preparar” las fotos y componerlas de modo que la respuesta de aquéllos que las observan sea la mejor posible. Las directrices aseguran el éxito de una foto en el 99% de los casos, pero siempre existeun 1% que se sale de la norma y que puede llegar a gustar incluso más que las fotos que siguen a rajatabla el conjunto de reglas de composición.
La Primera Regla: Elige El Elemento Principal de Tu Composición.
Toda composición debe tener un elemento principal, un objeto sobre el que deseas llamar la atención del que ve la fotografía, un elemento que pretendas que pueda “dar nombre” a la fotografía. Lo que se busca con una fotografía es, precisamente, presentar ese objeto de uno u otro modo, pero presentar ese objeto, al fin y al cabo.
Por tanto, la primera regla que se debe aplicar antes de comenzar a pensar, siquiera, en otras reglas, es identificar el objeto sobre el que deseas centrar la atención del que observará la fotografía. Una vez elegido este objeto ya tienes mucho ganado. Eso sí, no es una elección fácil. Muchas veces dudamos entre el objeto al que queremos dar mayor peso en nuestras fotos y ése es precisamente el problema de que algunas de ellas no funcionen.
Elementos Compositivos: El Punto y la Línea
Después del anterior apartado puedes pensar que, a partir de ahora, deberás buscar objetos aislados y puntuales para que sean centro de tus composiciones y debo decirte que no es así.
Desde el punto de vista compositivo, existen dos tipos de elementos principales con los que deberás jugar en fotografía: el punto y la línea. Entendido en un sentido amplio, el punto será un objeto, o conjunto de éstos, que no presenta un trazo lineal, sino que ocupa un determinado área dentro de la fotografía. Por su parte, la línea será un objeto en forma longitudinal, o bien un conjunto de éstos, que compone una línea, y que conducirá la mirada del que observa la fotografía desde un extremo a otro de la misma.
La Segunda Regla: Mejor Cuanto Más Simple
Cuando uno empieza en esto de la fotografía tiende a incorporar en sus fotos el mayor número de elementos posibles, como si se tratase del “bolso de Mary Poppins”!!.
Sin embargo, a medida que va adquiriendo cierto criterio se da cuenta de que con eso lo único que se consigue es distraer la atención del que ve la foto e impedir que la atención de éste se dirija hacia el verdadero centro de interés de la fotografía. De modo que a la hora de componer ya sabes, lo primero, como hemos dicho antes,es elegir el objeto que será centro de la composición. Pero, lo segundo y no menos importante, es tratar de eliminar de la fotografía todos aquellos elementos que distraigan o impidan dirigir la atención del que observa la foto sobre el verdadero centro de interés de la misma.
Recuerda: Mejor cuanto más simple.
El Funcionamiento de Nuestros Ojos.
El fundamento que da sentido a todo lo que hemos dicho hasta ahora y todo lo que diremos en lo sucesivo es, como no podría ser de otro modo, la forma en que funcionan nuestros ojos. Pensemos en la segunda regla : “Mejor cuanto más Simple”.La explicación que se puede dar a esa regla, en lo que respecta a nuestros ojos, no es otra que el hecho de que no podemos ponernos bizcos y mirar a dos o más objetos a la vez.
O centramos nuestra atención en un objeto o en otro, pero no en muchos a la vez, porque si no, nuestros ojos se agotan sin dar ningún sentido a la fotografía. Y en caso de que haya más de un elemento principal en nuestra fotografía, éstos deberán mostrarse debidamente armonizados, con equilibrios en cuanto a distancias y tamaños entre los mismos, colores, texturas, etc.
Si observamos la imagen siguiente hay más de un elemento en la fotografía.
Aunque hay 3 objetos, se observa un elemento lineal único, constituido, eso sí, por 3 elementos. La fotografía, al igual que una pieza de diseño, como arte que son, están abiertos a diferentes interpretaciones; y esas interpretaciones son las que hacen que una foto funcione o no...
Consejos finales para la Composición:
...a tener en cuenta :
Dirección de la mirada. Cada persona tiene una forma de “leer” las imágenes que viene determinada por su cultura y que se aprende desde pequeños. Así, mientras un occidental leería una imagen de izquierda a derecha y de arriba a abajo, un árabe lo haría de derecha a izquierda y de arriba a abajo y un oriental lo haría de arriba a abajo y de derecha a izquierda. Aunque te parezca una tontería, el éxito de una foto vendrá determinado por criterios como éste, el de la forma que tienen los seres humanos de “leer” las fotografías.
Impacto visual. Existen formas, colores, tamaños o distribuciones que tienen más fuerza que otras a la hora de llamar la atención del que observa la fotografía. Aquí tienes un pequeño resumen de algunos de estos criterios a la hora de saber llamar la atención sobre unos objetos frente a otros:
- Claro tiene más fuerza que Oscuro
- Cercano tiene más fuerza que Lejano
- Aislado tiene más fuerza que Agrupado
- Nítido tiene más fuerza que Desenfocado
- Grande tiene más fuerza que Pequeño
- Color tiene más fuerza que Escala de Grises o Blanco y Negro
- ¿Horizontal o vertical? En función de la sensación que quieras transmitir será más recomendable la elección de un tipo de encuadre u otro. La disposición horizontal responde a la forma en la que vemos la realidad y proporciona una sensación de calma y tranquilidad. Por su parte, la distribución vertical genera en el que ve la imagen mayor tensión.